viernes, 22 de diciembre de 2017

Noviembre 2016

Estamos en misa, miro el altar estas al lado mío, ya tuvimos esa reunión, esa en la que me comenzó la picazón en todo el cuerpo, esa pauta todo tan controlado, desde la entrada la canción, el coctel, la música, el ramo, las fotos...las fotos me acuerdo que pensé tu mamá va a estar con cara triste, no será su mejor cara, tus hermanos felices, las chicas también y la pequeña sonriente como siempre tu papá, creo que quiero que todos estén felices y si la mujer más importante no lo estará como recordar esas fotos...stress. Te vuelvo a mirar, veo entrar al cura, me imagino entrando con mi papá y no te veo feliz....no me veo feliz...el stress traiciona.

Recuerdas las fiestas de nuestros trabajos a comienzos de octubre el mismo día, diferentes lugares te cuento que lo pase tan bien, baile un montón (cosa que no hacia hace tanto tiempo) me cuentas que también lo pasaste tan bien, también bailaste, el sábado me toco trabajar, después te fui a ver, como siempre lo hacia, nos contamos como estábamos y ahí me dijiste esa frase, esa línea que podría haber pasado totalmente desapercibida, una broma, pero que hizo un eco gigante dentro de mí "parece que lo pasamos mejor separados", pero ¿cómo? si queremos estar juntos queremos compartir nuestra vida, si lo pasamos bien separados pero ¿mejor que juntos? 

Volvemos de vacaciones, yo me quedo una semana más en mi casa. ¿Me extrañaste? o como la mayoría de las veces "tenía tantas cosas que hacer que no alcance". Te amo pero no se, me amas así? me miras? me sientes?...Tengo dudas...tengo dudas...

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